¡Renovación de Verano!

23 jul 2015

photo credit: visualpanic via photopin cc

Después de todo un año trabajando, estudiando, inmersos en nuestra rutina de cada día, por fin llega el período de las vacaciones. Llega el verano, el buen tiempo, el calor y por fin, tras meses de prisas y estrés, disponemos de tiempo para relajarnos y pensar. La idea del blog de esta semana es que podamos pensar cómo aprovechar este stop de nuestra rutina diaria como un momento de reajuste reparador que nos recargue de energía para llegar al mes de septiembre sin el típico “síndrome post-vacacional”.

 

A lo largo del año, es más que habitual que desatendamos y no prestemos mucho cuidado a nuestro cuerpo. Tenemos la agenda llena de compromisos que a veces nos obligan a comer mal, a realizar escasa actividad física y a dormir menos horas de las que nuestro cerebro necesita para recuperarse. Así, un primer paso para cuidarnos durante el período vacacional y recargar nuestra energía física y cuidar nuestro cuerpo, es, en primer lugar, comer sano, con tiempo y compartiendo con los demás. En segundo lugar, aprovechar nuestros meses de descanso para ponernos en forma a través de ejercicios físicos suaves y lúdicos (nadar o andar unos 20 minutos al día, ir en bicicleta, practicar deportes de equipo en familia o en pareja, etc.). Y en tercer y último lugar, cuidar y mimar el descanso de nuestro cerebro. No se trata de dormir durante las vacaciones todo lo que no hemos dormido durante el año, ya que el sueño no es acumulativo y no se puede recuperar, pero sí se trata de dormir las horas que necesitamos (suficiente por la noche y, por qué no, alguna siesta reparadora de no más de 30 minutos).

 

Además de cuidar nuestro cuerpo durante esta etapa más relajada del año, deberíamos liberarnos de todo lo que sobrecarga nuestra mente y la bloquea para recibir más. Centrándonos plenamente en las experiencias que vivamos durante este período podremos pasar página de malas experiencias y frustraciones vividas durante el año. Permitámonos aparcarlas temporalmente si no están resueltas para poder descansar mentalmente durante este tiempo vacacional. La única forma de no pensar en algo es pensar en otra cosa, así que concéntrate en tu tiempo de descanso y en las experiencias que vivas poniendo tu energía en el aquí y el ahora.

 

¡Feliz verano y felices vacaciones para todos!

 

 

Adriana Larrañaga Mendoza.

Psicóloga General Sanitaria de CALM Psicología

@psicolarra psicolarra@gmail.com

 

 

 

 

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